He vuelto a instalar mi flamante Windows 8.1 en mi portátil (un pedazo de i7 con 12 GB de RAM) y llevo un par de días usándolo sorprendido porque, abriendo el administrador de tareas cuando el PC se supone que no hace nada, me encuentro que el disco duro está permanentemente al 100%.
Solución, al tema:
Hacemos clic sobre el Menú Inicio y escribimos "Ver servicios locales", para abrir la ventana que gestiona los servicios de Windows.:
Nos aparecerá la siguiente ventana de servicios locales:
Ahora buscamos los dos servicios que están dando guerra, el primero "Superfetch":
Abriremos el administrador de tareas y comprobaremos que, efectivamente, nuestro disco duro ya no está sufriendo el azote de Windows.
Si queremos detenerlo permanentemente, tendremos que abrir las "Propiedades":
Selecionaremos el Tipo de Inicio "Manual" y haremos clic en "Manual".
Con esto, ya tenemos todo hecho. ¡Suerte!
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